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Desde la pasadas elecciones a la Presidencia de Estados Unidos, desde Europa todo han sido elogios a Barack Obama: esperanza, posibilidad de un cambio de rumbo hacia el multilaterismo, reconducción -que no refundación- del sistema capitalista y bla, bla, bla.

Pero el pasado 5 de noviembre, no sólo se elegía al nuevo inquilino de la Casa Blanca; concretamente en California se votó afirmativamente la Proposición 8, un fallo que modificará la Constitución para impedir el matrimonio entre personas del mismo sexo, de momento solamente en el estado sureño. No obstante, oscuro precedente en el camino a la igualdad en el país de la... ¿Libertad, era que lo llamaban?

Una de las primeras en pronunciarse ha sido Ellen DeGeneres, casada desde mayo con su pareja Portia de Rossi.
La actriz escribió en su web, que si bien con el triunfo de Obama: “el cambio llegó. Yo, como millones de estadounidenses, siento que un gigantesco paso hacia la equidad se ha dado. Se hizo historia en nuestro país"; tristemente luego añade: “Pero cuando finalmente fue claro que la Proposición 8 fue aprobada en California, sentí cosas que no puedo explicar. Estuve inconsolablemente devastada. Obama fue un gran paso adelante, pero con la Proposición 8 dimos un gigantesco paso hacia atrás.

También la cantante Melissa Etheridge se ha mostrado indignada y más contundente al proponer a los gays dejar de pagar impuestos ateniéndose a No taxation without representation (no hay impuestos sin representación). Melissa ha escrito: "no tengo que pagar mis impuestos porque no soy un ciudadano de pleno derecho.

Sin duda la victoria de Obama ha sido un gran paso para el hombre, pero un paso atrás para el colectivo GLBT. Menos mal que nos queda gente como ellas, dispuesta a plantarse y exigir nuestros derechos.

Aunque de momento No, We Can't (No, no podemos), nuevamente, las chicas son guerreras!!!